Nothing..

I'm just a monster.

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Escóndete.

Esculpir..

La joven se acercó aquella noche al río.

Dicen que cuando la amada sonríe completa en el cielo, su dicha permite la entrada por su puerta de luz en el agua a quien logre llegar por ella en medianoche. Se sabe también que quizás solo sea de entrada.

La joven esperó cauta tras abril el paso selecto de las once con cincuenta y nueve. La luna solo avanzó brillante por el oscuro cielo.

No se sabe porqué aquella noche en que estaba llena, la puerta jamás apareció.

En medio del río algo se hacía notar, la joven adentrándose en sus aguas halló su razón. Se sumergió para poder recogerle y entendió que para poder ver aquella puerta primero le era necesario entregar aquel corazón que con el paso del tiempo se había transformado en piedra.

Se desconoce su destino y si cumplió dicha entrega encomendada por la luna en período lleno, solo se sabe que aquel río aún la espera para abrir su puerta si supo amar.

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Sonríeme.

Miedo..

Tengo miedo, miedo de olvidar-te.

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Lejos.

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Se escucha: White Flag - Dido

"And if you live by the rules of "it's over"
then I'm sure that that makes sense.

I will go down with this ship,

and I won't put my hands up and surrender"

Amor sin des..

Componer, como creación de realidad en el sueño. Aceptar lo que quieres haciendo espacio para ello.

Quiero ese amor, amor que nació borrado de des-amor, porque el prefijo no impone y no hará presencia.

Quiero alegrías, esas que empapan mi cara en cada instante. Siempre sonrío.

Quiero volar, porque para eso es que tenemos alas.

Y quiero querer, porque en el querer es donde se traza el poder hacer realidad.

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Borrando pre-fijos.

Danger keep away..

El viento sopló, pero sin embargo no se llevó nada.

Solo susurró del modo que le fue posible y se alejó.
Yo. Yo solo sonreí.

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Vivir.

Honey..

Your smile lights up my darkness and I love it.

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These are colors for you and not ask :)

Tres pasos..

Sentada, buscando mi sonrisa entre los escombros de mi bolsillo encontré la tuya.

Tres veces miré a mi alrededor y avancé,

tres dejé pasar en aquel andén.

Dudé entonces si debía regresar-te-la, puesto que no me pertenece. Pero, una sonrisa le va bien a quién la posea.

Sonreí con ella. Pero tres hojas cayeron mostrando el llanto insostenible del tiempo.

Tres palabras pronuncié al viento esperando respuesta,

tres veces me levanté.

El cuarto sí, el cuarto fue abordado.. Mais você não estava nele. Mas, eu ainda estou dançando aqui.

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Báilame.

Procedimiento para matar 5 años..

Sin contar todo el cariño, después de terminar diga un adiós y deje a esa persona como si jamás hubiera sido ni siquiera algo importante para usted. Importante, este es el punto más necesario de realizar, el dejar a la otra persona como si de verdad nunca le hubiese significado nada, menos que un desconocido en la vida.

Podrá observar inmediatamente los resultados, esa persona sentirá que hasta los recuerdos bonitos que podrían existir usted se los lleva bajo su zapato. Y junto a ese zapato también quedan los pedazos del que se volvió a transformar en piedra.

Apertura..

Corre por la calzada buscando la luz de algún farol,

no es que le de miedo la oscuridad, miedo le da lo que hay dentro de ésta, su letheia a las retinas.

No se detiene a oír los sollozos ajenos, más bien grita y no es escuchada.
Busca y no encuentra, perdiéndose el silencio entre sus voces que emiten un trigésimo segundo te amo, sin receptor.

Se encuentra desnuda frente al des-conocimiento. Es un volver donde el comienzo termina, es un buscar afloro en el rostro de una expresión alternativa de felicidad.

Algunos le llaman sonrisa, yo le llamo valentía.

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Abrázame.

Letheia (griego): Ocultamiento de la verdad.

Amor al amor..

Y el calor, repite en verso una y otra vez suspiros acogidos en tus mejillas, después de esos besos que encuentran vida contigo.

Se desespera el insinuar del viento con los vellos levantados en armonía simulando escalofrío,

o es tal vez esa chispa que se mantiene encendida iluminando destino.

Es un trigésimo primer te amo, que acompañado se cubre de manto para no sentir el invierno. Se ama el invierno, pero no su frío.

Y se pierde, más no sus manos que son tuyas como la primera vez.

-¿Gustas de bailar conmigo? Para mí, siempre será un placer.-

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Toma mis manos.

Hoy..

Solo quiero que me abraces

y me regales los destellos que buscan por donde escapar,

a veces se manifiestan en calor, a veces escapan por los ojos

o en palabras alocadas rebosantes de sentimiento.

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Abrázame en mis 21,

y no me sueltes.

De mi..

.. Entrega.

En la nada se abre camino, mientras se cruzan grises y azulados.

Salta y ríe descalzo, encontrando abrigo en esos besos sin tiempo y busca el modo, ese en que las excusas sobran dejándolas para la indiferencia.

Allí se cruzan en un espacio reducido para todos y para nadie. Nadie corre, todos escapan.

Por eso, permanecen inmóviles ante la inercia que los empuja a querer contradecirse unos entre otros. Y se quedan, porque encuentran miradas razonadas.

Un trigésimo te quiero es mi modo, en el que tomo tu mano y te invito a la felicidad.

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Sonríe.

Beso..

Y el desvelo piensa en noches llenas de letras que brillan por incandescencia.

Se lanzan en paracaídas sin destino. Se encuentran en ojos cerrados pidiendo en susurro o en silencio.

Yo le pido un perdón, le doy un gracias y le sonrío.

Perdón por dejar de sonreír.

Gracias por regresar-la a mi.

Le entrego la sonrisa junto a un vigésimo octavo te amo..

Y me cuelgo a las letras para besarte en buenas noches.

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Abrázame

Contexto..

Y caminaba en diferentes direcciones, sin moverse de su sitio.

- ¿Dónde vas? - le pregunté con cierta intriga.

- A este sitio - Me contestó mostrando un dibujo marcando un destino en otro dibujo.

Ella no conocía dónde eso quedaba, solo sabía que tenía que estar allí, desconociendo fecha y hora, además del porqué. Por mi parte, yo no entendía porqué le pregunté.

La invité a tomar asiento para beber un café, cortesía con la chica desconocida.

Ella no entendió la taza, pero sí el contenido del vigésimo quinto te quiero y mi compañía, en cierto modo.

Charlamos, en miradas se olvidó.

El tiempo ya era un desconocido. Quizás había hallado el lugar.

Y yo había encontrado el dibujo.

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Abrázame

En el tintero..

Carta en movimiento, sentimiento amante,
explosión alterna de sonidos espaciales.
Colores marchitos de sonrisas danzantes, me gustas.
Un eco que se parece al cielo en tus ojos,

con los violines, estridentes cuerdas pintadas de rojo,
acompañadas de tus sueños en yo almohada.
Vaiven suave y fuerte de alucinaciones,
pérdida de noción córporea en el espacio que divide el horizonte.
Te amo, es un décimo octavo, el primero.
Retomo sonidos olvidados de imagenes lejanas, ahora en dos.
Ahoga mi silencio tu respiración mientras te encuentras abrazada.
Corre el camino, más no mis pies que buscan agua y se sacían de tu sed.
Ya es el deseo incontrolable en mis extremos.
Toma mi pluma en la que mis versos cantan.
Escucha mis besos que en tus labios callan.

Anunciando el latido, tras mi mirada dos palabras toqueteadas;

Más nunca suenan del mismo modo.

Olvida el derroche de petalos, procuraré no hacerlo olvidado.
Caen juntos, juntos al esconderse tras blancos y azulado.
Se escapa, más no tu cuerpo de mis años.
¿Dónde estamos?
Lejos, pero juntas.

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Quédate